28.12.07

Fin de año, final de fiesta: El desmadre total...

Creo que nunca hemos dicho que desde "La Neuralgia del Trigémino" realizamos una inestimable labor social y educativa. Ya que amén de guiarles por los procelosos mares de la cultura basura a través de (procaces y chabacanos) posts, nos preocupamos por hacer que sonrían (o rían) de vez en cuando en sus puestos de trabajo (que es donde se conectan a Internet...lo sabremos nosotros!) contándoles tonterías y soplachuminadas que a decir verdad no llevan a ningún sitio.

Los halagos y felicitaciones que (muy) de vez en cuando nos hacen llegar, no provocan sino el engrandecimiento de nuestro ya de por si, colosal ego. Aun así disfrutamos empleando toda nuestra (maltrecha) imaginación, agudeza e inventiva, usando toda nuestra ironía, socarronería y sarcasmo, utilizando todos los resortes del humor más negro, absurdo e irracional con el fin de elaborar estos textos plagados de chorradas por doquier. Y lo peor de todo es que a veces nos creemos buenos...


Pero luego llega la vida real y te pone en su sitio de una hostía bien dada. Es decir, que por mucho que nos esforcemos en rizar el rizo, la realidad te sorprende cada día con un ejemplo insuperable de hilaridad, locura, bizarrismo, incorrección, demencia, frenesí, disparate, excentricidad, imprudencia y por desgracia insensatez. Lean, lean...




ENTREVISTA EN EL DIARIO CANARIO 'LA OPINIÓN'
El obispo de Tenerife: 'Hay menores que desean el abuso e incluso te provocan'


"Puede haber menores que sí lo consientan -referiéndose a los abusos- y, de hecho, los hay. Hay adolescentes de 13 años que son menores y están perfectamente de acuerdo y, además, deseándolo. Incluso si te descuidas te provocan". Con estas palabras ha descrito el máximo responsable de la Iglesia en Tenerife, el obispo Bernardo Álvarez, el grave problema de los abusos a menores en una entrevista en el diario local 'La Opinión'.

El obispo además compara la homosexualidad con los abusos y, aunque asegura que la diferencia entre la homosexualidad y los abusos está clara, plantea una pregunta: "¿por qué el abusador de menores es enfermo?".

En cuanto su opinión sobre los homosexuales, Álvarez, pese a que asegura respetar esta condición sexual vuelve a mostrar su lado más crítico y afirma que "el fenómeno de la homosexualidad es algo que perjudica a las personas y a la sociedad".

Para el obispo, hoy en día "no es políticamente correcto decir que es una enfermedad, una carencia, una deformación de la naturaleza propia del ser humano. Eso que decía cualquier diccionario de Psiquiatría diez años atrás, hoy no se puede decir".

Además, considera que debido a la homosexualidad "a la larga pagaremos las consecuencias como las han pagado otras civilizaciones". Álvarez aconseja que para que no se lleguen a estos extremos "hay que promover la educación e inculcar los valores de la feminidad y la masculinidad".

A la pregunta de si hay que orientar la homosexualidad, el obispo se muestra aún más crítico y afirma que "no se puede dejar a las personas libradas a lo que salga (sic), ¿por qué no hacemos lo mismo con la violencia o con otros impulsos que tiene el ser humano?". Finalmente, asimila (la homosexualidad) a las agresiones sexuales, que "la persona practica como puede practicar el abuso de menores".

Aqui vemos al susodicho con el regalito que le ha dejado Papa Noel estas Navidades ¡Con cuidado Padre, que el niño es de Papel Couché!

Saquen sus propias conclusiones, que para eso ya son mayorcitos. Yo por si acaso, cuando oigo la palabra "Iglesia Católica" le quito el seguro a mi Luger.

Y Feliz Año 2008.

20.12.07

Que rancio era mi valle!!: Los Recreativos. Final Stage: El monstruo de final de pantalla!!

Desde esta, su página favorita de chorradas y tontunas, aprovechamos para felicitar las sacrosantas fiestas de Navidad a toda esa turba de lectores que aunque tímidos, pues apenas dejan comentarios al respecto abrumados tal vez por la magnífica prosa que despliega nuestro autor, no faltan a su cita mensual (ya nos gustaría que fuera semanal) con su blog favorito. Coman langostinos, coman. Y no se preocupen por el ácido úrico…¡total, no existe!

Concluiremos hoy, actualizando a una velocidad de crucero, la serie comenzada hace ya unas semanitas en torno a “Los Recreativos”. Como bien recordarán, ya hablamos tanto de sus características intrínsecas como de la fauna que poblaba estos cubiles de diversión y esparcimiento allá por los lejanos años 80…Hoy finiquitaremos el asunto con un somero repaso a los principales videojuegos a los que pudimos viciarnos durante aquella gloriosa y mítica época.

Pero lejos de ceñirnos a una descripción ramplona de cada uno de los “hits en 16-bits” que tenemos preparado hemos tenido la consideración de invitar al Psicoanalista argentino-uruguayo, el Dr. Alessandro Alegret (vía conferencia telefónica, aquí no reparamos en gastos), para que de alguna manera, ponga sus conocimientos a nuestro servicio con el fin de dilucidar las implicaciones psicológicas de la práctica de cada uno de los juegos en esa tierna edad que es la adolescencia y su relación con el desarrollo y emancipación del yo, el super-yo y el spider-yo si es preciso. De ahí el subtítulo de nuestro capítulo de hoy: “Dime a que jugabas y te diré del mal que has de morir”. Pido un fuerte aplauso para el Dr. Alegret…

Dr. Alegret: Esteeee, mushas grasias. Como ustedesh bien sabrán el campo de las primeras computadoras y sus aplicashiones ha sido uno de mis prinshipales objetos de estudio a lo largo de mi dilatada carrera, que empessó asha por los años setenta en la Universidad de Río de la Plata donde sho sha desharrollé la “Teoría cognitiva de los campos unificados” que no era sino una burda transformassión de unos escritos previos de…

Estupendo Sr. Alegret, otro día nos lo cuenta, pero vayamos al turrón propiamente dicho con el primer juego de nuestra serie.


TETRIS
El juego por antonomasia de aquellos a los que no les gustaban las maquinas. Y el juego preferido por las pocas féminas que osaban entrar en unos Recreativos. ¿Razón? Nunca ha existido un juego tan simple, tonto e inútil como el Tetris. Cuadrar una serie de piezas surgidas al azar con el fin de formar líneas completas para que siguieran surgiendo piezas al azar. Así, hasta el final de los tiempos o hasta que el nivel 20 de la máquina nos lanzara piececitas a una velocidad superior a la de la sinapsis química entre nuestro cerebelo y el centro motor haciendo totalmente imposible pasarse la máquina por mucho que continuaramos “insertando coins”. Invento soviético. Ahora todo se explica.



Dr. Alessandro Alegret: Esteeee, sin lugar a dudas, el Tetris fue un juego disheñado en exclusiva para mentes ordenadas y dissiplinadas, amantes del orden y la lógica y en parte aburridas y simplonas. Es dessir, las mujeres. Todo hombre o persona contraria al sesso femenino, que jugara o jugashe al Tetris buscaba una asimilashión o transformashión en un ente femenino dominante y dominador y por tanto podemos aseverar con rotundidad que estas personas escondían una homosesualidad latente.

BUBBLE BOBBLE
Dos dinosauros (uno amarillo y el otro azul) con problemas de crecimiento, se embarcan en una larga aventura a traves de 100 pantallas diferentes con el único fin de salvar a sus novias humanas. Para ello cuentan con la inestimable ayuda de su sopapo “burbujil” que es capaz de atrapar a sus enemigos los cuales mueren irremediablemente cuando esta burbuja de babas es reventada convirtiéndose en frutitas y pastelitos. ¿Qué mente enfermiza pudo haber ideado tal despropósito, Sr. Alegret? Y lo que es peor ¿cómo es la persona que jugaba a estos juegos?


Dr. Alessandro Alegret: Esteeee, sin lugar a dudas, un mundo virtual repleto de caramelos para aumentar la frecuensia o la distansia de los gargajos , zapatillas rojas para correr más, amen de una serie de dulses, golosinas y otros alimentos de valor nutritivo nulo, nos retrotrae a un mundo sin responsabilidad donde reina un osio despreocupado de carácter infantiloide que no puede sino relasionarse con la ineludible presensia de una homosesualidad latente.


OPERATION WOLF
Uno de los primeros juegos en primerísima persona, es decir donde se ahorraban realizar los gráficos del protagonista. Eres un marine altamente entrenado al que sueltan en medio de un país hostil (repleto de malvados y viles filocomunistas) con el fin de rescatar a una serie de rehenes (buenas e ingenuas personas filocapitalistas) y tienes que abrirte paso a base de las tres “Bes”: Balor, Boluntad y Buevos. Fin del juego: Cargarte a todo lo que apareciese por la pantalla con la ayuda de una UZI Submachine Gun (botón lanzagranadas incluido) tan solo disponible en aquellos recreativos “del puntito”.



Dr. Alessandro Alegret: Esteee, a pesar de la temática intrínseca del juego, el hecho de que el jugador empuñara (en un acto puramente fetichista) su propia Ussi Submachine Gun llegando a tomarle un cariño espessial, delata un claro referente falocrático que nos hace pensar en un jugador “tipo” con una innegable homosesualidad latente.

ARKANOYD
Eres una barra. Bueno, eres una nave espacial con forma de barra. Eres una nave-barra a la que las bolas le rebotan. Tu misión es ir cargándote unos ladrillos con las bolas que te rebotan en la nave-barra. Además estos ladrillos que destruyes con las bolas rebotadas en la nave-barra te dan una serie de mejoras para tu nave-barra. No, no he tomado drogas. Creanme. Y así muchas pantallas. Hasta aburrirse.

Dr. Alessandro Alegret: Esteee, Arkanoyd es un juego claramente psicotrópico ideado por una mente enfermissa. Pero más ashá del simple juego, vemos una analogía con la típica situasión de romper ese muro de ladrillos que nos impide mostrarnos como realmente ssomoss. Por lo tanto, es un juego característico de aquellas personas que ocultan una homosesualidad latente.


SHINOBI
En este juego tu eras un ninja (altamente entrenado again), cuya misión era rescatar a una serie de aprendices (femeninas) de ninja de las garras de pérfidos enemigos ninja, para ello utilizabas toda una pléyade de habilidades ninja…vamos, que todo queda en casa. Grandes hits del juego: Shurikens infinitos, el Boss típico de final de pantalla con un único punto debil y el archifamoso “Tira la mágia” cuando uno se veía acosado por los enémigos.



Dr. Alessandro Alegret: Esteee, de nuevo el hecho de que el heroe o protagonista prinssipal del videojuego sea un carácter tan ambiguo y andrógino como un guerrero ninja japonés, camuflado para que no reconoscan su verdadera identidad, nos retrotrae al consabido mito de la no aseptasión del propio ser y por tanto a un fenómeno de represhión de una homosesualidad latente.

OUT RUN
Como poseedor de un Ferrari Testarrossa descapotable tu misión es conducir de aquí para allá ignorando el nuevo código de circulación en lo que a límites de velocidad se refiere, con la única ayuda de una rubia despampanante en el asiento del acompañante cuya melena rubia cuidadosamente pixelada quedaba a merced del viento. En aquellos recreativos con solera, la máquina del “OutRun” estaba formada por un auténtico sillón de coche tapizado en sky, pedal de freno, acelerador y cambio de marchas perrunero, que hacia las delicias del respetable. El escapismo del pobre chaval de extrarradio…



Dr. Alessandro Alegret: Esteee, “Out Run” es un juego claramente elitista donde se enaltese y encumbra un modo de vida a todas luses impossible de alcansar por el pueblo shano. Quien jugo a este videojuego se decantaba por un modo de vida sofisticado, detallista, sheno de lujos por no decir snob. Y por tanto por un mundo de una gran homosesualidad latente…

STREET FIGHTER II
La O.N.U. en versión arcade. Soy de un país distinto al tuyo y por esa razón voy a canearte y darte tollinas hasta en el alma. Es más voy a hacer una tourné internacional para ir soltando yoyas “around the World” y así autoproclamarme “Campeón de Campeones”. Nombres como Ryu, Ken, Blanka, Chun-Li, Guile…han pasado a formar parte del imaginario colectivo y muchos nuevos padres salidos de los suburbios han bautizado a sus retoños con estos despropósitos en lugar de llamarlos con nombres mucho más hispánicos y típicos como Kevin y Sheila.


Dr. Alessandro Alegret: Esteeee, “Street Fighter II” en sus versiones “The World Warrior”, “Champion Edition”, “Turbo Hyper Fighting” o “The New Challengers” no dejan lugar a dudas en su análisis más sertero. Nos encontramos ante una serie de videojuegos que han fomentado desde todos los salones recreativos del planeta, una serie de clichés claramente relassionados con una homosesualidad latente. El esplicarlo nos llevaría tanto tiempo que prefiero no extenderme en el tema. Pero si quieren la dissertassión completa, rasonada y coherente les recuerdo que soy argentino por parte de padre…

GOLDEN AXE
Siento introducer la nota autobiográfica, pero es que “Golden Axe” ha sido, fue y será el mejor videojuego de Recres de todos los tiempos. Y no digo esto porque sea la única máquina que me he pasado un millón de veces pares (con todos los personajes) solo con cinco duros (y sin continuar) y además en distintos recreativos, sino porque forma parte de una de mis mejores (y mas tristes) momentos de mi adolescencia cuando ante una audiencia de una veintena de parroquianos ignorantes en el pueblo-alberca de mis ancestros maternos, logré pasarme toda la máquina (recién instalada), solo con cinco duros de crédito y SIN USAR LAS MAGIAS!!!! Mientras los paletos observaban perplejos el milagro que tenían ante ellos, uno que suscribe ganó una apuesta concertada con su primo, que le reporto unos beneficios impensables para la época de 1.000 de las antiguas pesetas!!! Yo no tengo palabras para describir “Golden Axe”. Solo les diré una cosa: Dos toques a la derecha (carrera) + salto + disparo. ¡¡La picada cósmica!!


Dr. Alessandro Alegret: Esteeeee, “Golden Axe”…leshendas medievales, mitos fantásticos, enemigos poderosos, bestias inmundas, magia y hechishería, duelos a espada, sangre y lujuria, mashacre y destrussión, la eterna lusha entre el bien y el mal, en suma, todos los componentes característicos de una homosesualidad latente.

Y esto es todo…soy sabedor de que muchas y grandes máquinas se han quedado en el tintero (Pang, Subset Riders, Capitan Commando, Double Dragon…), pero desde aquí sugiero a nuestros lectores a que nos indiquen sus títulos favoritos de aquella época para que el Dr. Alegret los analice como pertoca. ¿Alguna conclusión final, Doctor? Le rogamos sea breve.

Esteeee, efectivamente y no. Podríamos deshir que el mundo de los Recreativos, allá por los 80-90, hablando poco y mal, era un mundo de maricones. De musha mariconería.

¿Doctor Alegret, es usted homófobo?

¿Homoqué?

Gracias Doctor.

15.12.07

Que rancio era mi valle!!: Los Recreativos. Stage 2: Fauna

Retomamos con la tardanza a la que nos tiene acostumbrados el auténtico escritor de estos legajos cargados de nostalgia de extrarradio y adolescencia taleguera, al que por cierto tengo encadenado a la pata de la mesa desde hace semanas a pan y agua y no hace más que suplicarme piedad y perdón, mientras garabatea en hojas pergaminosas, palabras sin sentido. ¡Que sabrá él de sufrimiento!

Ya contábamos hace unas semanas que los Recreativos, allá por los años 80-90, fueron ese nuevo Ágora donde la muchachada se reunía y confraternizaba jovialmente. Y es más, describimos pormenorizadamente las actividades lúdicas que cualquier adolescente podía llevar a cabo entre esas cuatro paredes amén de fumar porros…o algo peor.

Pero como si de una película se tratase, en la que solo una perfecta conjunción entre la cuidada ambientación, los magníficos decorados y unos actores talentosos da lugar a una obra maestra (muy de vez en cuando), no solo el continente (entendido como el oscuro y mugriento local físico) era importante en el devenir de una sala Recreativa. Sino también su contenido, es decir, el rebaño de personas, personajes y gente de mal vivir que campaban a sus anchas por la tramoya de la felicidad juvenil que otrora llamábamos “Recres”.

Podemos (y deberemos) clasificar la fauna “Recreativa” en grandes grupos dentro del Reino Animal y emplearemos, es más, la nomenclatura del botánico y naturista sueco Linneo para dotarlos de taxonomía, ya que “Nomina si nescis, perit et cognitio rerum” (Si ignoras el nombre de las cosas, desaparece también lo que sabes de ellas).

El Gran Mangui. Furtatum peligrossum

Pocos y aislados “Grandes Manguis” se han conocido en la historia de los Recres. No debemos confundirlo con el “Mangui menor” o incluso con el “Pintilla” ya que caeremos en un error imperdonable. El Gran Mangui era pura leyenda. Algunos hasta osaron atreverse a decir que no existía sino en la cabeza de los atemorizados adolescentes. Únicamente con mencionar su nombre en un Recreativo, sin ni siquiera echar mano de la presencia física del mismo, provocaba un repentino y absoluto silencio sepulcral y eclesiástico seguido de un pavor y “acojonamiento” instantaneo en todos y cada uno de los presentes. El Gran Mangui tiene su equivalente en los grandes felinos del Reino Animal. Las pocas veces que se ha constatado su visita fugaz a unos Recres, junto a toda su cohorte de Manguis menores que formaban su banda, ha sido para atracar/pegar/apalizar/robar (todas ellas acciones claramente ejecutivas) sistemáticamente a cualesquiera de los chavales que rondaban indefensos por allí (lo de jugar a las máquinas no era lo suyo). Si bien podía adscribirse normalmente a la etnia gitana (o acalorrada), aumentando más si cabe su fiereza y peligrosidad, no siempre esto ha sido imperativo. Poblaciones como Xirivella, Alaquas y Aldaya (en lo que se ha denominado la Reserva Natural del Barrio del Cristo) han nutrido de Grandes Manguis a la comarca valenciana de L´Horta. Ahí van algunos nombres: El Ernesto, Los Gemelos (un curioso ejemplo de dos Grandes Manguis trabajando en perfecta armonía)...En la actualidad y dada la introducción de especies foráneas (Sudamericanos, Europa del Este) en los mismo nichos ecológicos, el Gran Mangui patrio se halla extinto. Los pocos que sobrevivieron acabaron o bien en el Centro Penitenciario de Picassent o reponiendo material en el Carrefour.

El Mangui Menor. Calorrum Derbivariunt

El Mangui menor formaba parte de la manada que el Gran Mangui tenía a su cargo. De menor fiereza y/o poder, su fama no bastaba para atemorizar al personal, pero si el nombrar en cualquier momento peliagudo el nombre del clan al que pertenecía con las siguientes frases: “¡Como llame a mi amigo el XX(Gran Mangui)XX!!” o “¡¡Que soy de la colla de XX(Gran Mangui)XX!!”. El Mangui menor apenas realizaba tareas ejecutivas sin la supervisión del Gran Mangui. Sus atracos siempre eran menores y en ocasiones de escasa credibilidad, con frases como: “¡¡Chaval, dame cinco duros!!” o “¡¡Lo que lleves en los bolsillos para mi!!”. A lo sumo se limitaban a dar vueltas por la manzana con su Derbi Variant (tubarro Metrakit incluido) controlando por parejas la zona asignada por su superior, robar tres o cuatro plumíferos, lucir la navaja mariposa con movimientos concienzudamente aprendidos o apartarte de la maquina mientras te quedaban todavía dos vidas por jugar o del futbolín para apropiarse del mismo una tarde entera. De nueva otra especie extinta. Los pocos que sobrevivieron nunca acabaron en Picassent (dada su falta de peligrosidad), mas bien se transformaron en dóciles ciudadanos que trabajan en turnos de 15 horas, casados, con 3 hijos a su cargo, paella en casa de los suegros todos los domingos y unas rayitas de coca sábado si, sábado también. Cobran una miseria y votan al PP porque “¡es que hay que ver como se ha puesto lo de andar por la calle, que esta toda llena de delincuentes con tanta inmigración!”.

El Pintillas. Submangui tristissimum

Sin duda alguna, una degeneración genética de los Manguis anteriormente citados. El Pintilla quería promocionar a Mangui menor, pero su baja estatura, su carencia de personalidad y que no tenía ni media ostia bien dada lo hacían claramente imposible. A diferencia de los Manguis de verdad, cuyos clanes dominaban dos o más salones recreativos, el Pintilla reducía su radio de acción a un único salón recreativo y encima en un horario en el cual no coincidiera con los Manguis auténticos. Su actividad, similar a la de las hienas, era simplemente carroñera. Atracar a niños que tenían 2 duros para comprarse un flash de Peggy, pedirte dar una vuelta en la moto (si es que se tenía una) o como mucho pedirte que le dejaras jugar esa parte de la máquina que jamás podías pasarte. Mucho ojo. El Pintilla tenía menos idea que tu y si le dejabas, corrías el riesgo más que seguro que tu partida acabara en un abrir y cerrar de ojos. Otro rasgo que definía a un pintilla era que siempre estaba pidiendo cigarros. Parece ser que estudios posteriores han demostrado una dependencia física por la nicotina de los “Fortuna”. Pero fumar tampoco era lo suyo. Prueba de ello era que el pintilla, harto del detestable sabor del tabaco, siempre estaba escupiendo y soltando sopapos sin parar. ¡Qué curioso! De ahí que otros autores sostengan que el tabaquismo del Pintilla se debiera más bien a una actividad social. Es un misterio todavía sin resolver donde residen actualmente los antiguos Pintillas, parece que como si se los hubiera tragado la tierra. Aun así, la especie no ha desaparecido ni mucho menos. Así, multitud de Pintillas, pueblan los Centros Comerciales, Salas de Multicines y Parques Públicos de nuestra geografía nacional, obteniendo el mismo éxito que sus antecesores. Es decir, ninguno.

El Máquina. Joystickii Hachorum

Todos nos hemos preguntado alguna vez a que actividad se hubiera dedicado el Máquina si no se hubieran inventado las 16-Bits. El Máquina era aquel chaval que indefectiblemente y sin apenas haber jugado algunas partidas era capaz de pasarse la máquina con los ojos cerrados además de conocerse (a los tres días de su instalación y puesta en marcha en el Recreativo) todos los trucos, golpes mil y una infernales combinaciones y secuencias entre el joystick y los botones (patada+patada+salto+puñetazo+derecha+derecha+etc…) para que el personaje se tirara un follo flamígero por el culo capaz de barrer de enemigos toda la pantalla. El Maquina por regla general era consciente de su poder y capacidad de atracción. Y siempre se podía constatar su presencia en los Recres observando la reata de mirones que se agolpaban a ambos lados de la máquina sin perderse ni un segundo del devenir de su idolatrado semi-Dios por los universos digitales. Algunos apuntan que el vasto conocimiento del Maquina no era algo natural sino que se basaba en una práctica incesante tanto en casa (por norma era poseedor de un ordenador doméstico donde afinaba más si cabe sus reflejos) como en los recreativos (con el consiguiente gasto económico que muchos justifican gracias a una generosa paga semanal por parte de abuelos con complejo o a pequeños y periódicos hurtos en el monedero materno). Quien sabe…En la actualidad, los Máquinas son en su mayoría informáticos aficionados o funcionarios locales que no pegan ni chapa.

La Barbie del Recre. Zorrum putonessim

Al igual que todo Recre que se preciara tenía su Gran Mangui, todo Recre debía tener su buena media docena de “Barbies”. Para entendernos, la “Barbie” del Recre era aquella mujer que se dejaba caer por allí en busca de carne fresca y de calidad, por lo general de Mangui para arriba. Sabedora de su belleza innata amén de lo avanzado de su crecimiento estrogénico traducido en una poderosa delantera para su edad biológica, la Barbie o Zorrón no dudaba en liarse con todo Mangui menor que le acosase, en pos de su objetivo final, que no era otro que llegar a intercambiar saliva y babas con aroma a tabaco en los baños del Recreativo con el preciado Gran Mangui. Dejemos claro que a la Barbie, salvo el Tetris en nivel fácil, las maquinas se la traían al pairo y lo único que buscaba en los Recres era subir en la escala social barriobajera al precio que fuera. Nada mejor para una Barbie de Recreativo que llegar un sábado por la tarde a los lomos de una briosa Yamaha Especial 125 cc robada, conducida por su hombre…Una lástima que todos sus sueños y anhelos se quedaran ahí, en ser la Reina de los Suburbios. La belleza de estas chicas pronto palidecía y el proceso de marchitamiento acelerado era inevitable. Una cara bonita pronto dejaría paso a una jeta de Maruja con 22 años y lo que antes era una tetamen explosivo ahora eran unas mamellas colganderas modelo bolsa de agua. Acabaron todas de cajeras culonas de Mercadona, esteticiens (que palabro más cachondo) con pestuzo a laca Nelly, peluqueras de mechas de colores imposibles o simplemente amas de casa. Pero pudieron decir que vivieron…que les quiten lo bailao.

La amiga fea de la Barbie. Zorrum apestossum variedad cayus malayus

¿Cómo se sabe que una mujer es guapa? Cuando está rodeada de otras hembras más feas que ella. Elemental mi querido Watson. De ahí que la Barbie siempre anduviera rodeada de toda un grupito de callos malayos para hacer contraste. Estas mujeres por norma general se quedaban con aquellos despojos que la Barbie despreciaba. No necesitaban por tanto mejorar su aspecto físico así como sus maneras (famosa todavía es, la mala leche que destilaban algunas), ya que el hecho de ser comparsas de la “hembra alfa” les aseguraba su alimento semanal. Muchas de ellas tenían un semblante más simiesco tirando a machorro. Estas últimas se diferenciaban del resto ya que jugaban al futbolín arreándole buenos “viajes” e incluso por la existencia de un dudoso abultamiento en la entrepierna…En la actualidad, todas están infelizmente casadas y se llaman unas a otras por el sobrenombre de “Mari”.

El tonto de los Recre. Subnormalum profundissim

Siempre hay un tonto everywhere you go. Y en el mundo de los Recres no va a ser menos. En todos ellos siempre moraba un ente y/o ser de edad indefinida (podía ser más crío o podía ser adulto) que era tonto de remate, imbecil, subnormal, retrasado…No me pregunten el porqué. Es como si una Agencia Estatal de Tontos se encargara de repartir un tonto por cada salón Recreativo que pidiera su licencia de apertura. El Tonto, ademas de bobo, normalmente olía mal (una extraña mezcla de mierda, sobaquina, semen revenío), hablaba tartaja, era algo bizco, vestía como el culo (con ropa de verano en invierno y viceversa) y se limitaba ver como jugaban los demás. No había sensación más desagradable que estar jugando y ver como se acercaba el Tonto. No por nada, sino por su hedor a zurrón de pobre. Tiraba para atrás. Sus comentarios eran totalmente ininteligibles. La desventaja principal de este personaje es que ocupaba el último lugar de la cadena trófica y por tanto se llevaba más ostías que una estera. Todo, absolutamente todo el mundo (incluido el Pintillas), le pegaba collejas, cachetes, ostiones, puñetazos al bajo vientre día si y día también. Y ah! del que no lo hiciera…corría el riesgo de transformarse en un nuevo Tonto!! La vida de estos personajes era triste, para que mentir. En la actualidad todos ellos, henchidos de rencor y odio para con la sociedad que tantas tollinas les ha arreado, se han embarcado en la titánica tarea de destruir a la humanidad con sufrimiento superlativo incluido mediante un plan perfecto e infalible…que no han logrado inventar porque son TONTOS. No dan para más…

En fin, y hasta aquí, más o menos lo que teníamos pensado para hoy. Recuerden que todavía queda una entrega adicional de esta mini-serie: Videojuegos míticos y trucos para pasarse la pantalla…algo así como “dime a lo que jugabas y te diré como eres”.

Derbi Variant Start, modelo 1989 (cestilla delantera incluida)

Todo un sueño para muchos...

25.11.07

Que rancio era mi valle!!: Los Recreativos. Stage 1.

Permítanme, mis queridos lectores, un pequeño paréntesis en las tribulaciones, andanzas y desventuras de nuestro querido Polaina con el único fin de firmar un nuevo artículo perteneciente a la sección “Que rancio era mi valle” y que sin lugar a dudas hará las delicias de grandes y pequeños. Se dividirá en tres secciones: 1. "Breve bosquejo del asunto". 2. "Fauna de los recreativos (finales de los 80)" y 3. "Videojuegos míticos y trucos para pasarse la pantalla".

Hubo un tiempo en que la infancia-adolescencia española no tenía a donde ir por las tardes. Es decir, cuando el gélido viento de los meses de invierno hacía imposible la permanencia por más de cinco minutos en patios cochinos, soportales mugrientos, parques llenos de cacas de perro y bancos devencijados plagados de pieles de pipas y lapos, lo de subir a casa de los colegas a jugar a la Play 2 era una entelequia, un anhelo imposible. Y es que, por increíble que parezca, la Play 2 no existía. En su lugar la zagalería de finales de los 80 solo disponía como elemento lúdico-electrónico hogareño (en el mejor de los casos) de una serie de subproductos informáticos a cual de todos más infecto y cochambroso, con nombres extraños a más no poder. Me refiero a “cajas de zapatos con teclas” de la categoría del MSX, Spectrum y Amstrad CPC todas ellas con sus unidades de casette garruleras que tardaban del orden de una a dos horas para hacer los cálculos que llevarían a un ser humano siete minutos. Eran lentos, eran malos, eran infumables, eran perniciosos…pero mire usted por donde, se usaban…porque no había otra cosa.

Gracias a Dios y a la iniciativa de una serie de prohombres que es justo nombrar en este artículo, la falta de un Agora adolescente donde los púberes y no tan púberes disfrutaran despreocupadamente de su tiempo libre mientras sus hormonas estrogénicas iban haciendo de las suyas quedo solventada con la apertura de una serie de pequeñas y medianas empresas que aprovecharían el boom de la informática que palpaba en la sociedad (yo también ví TRON cuando era pequeño y lo flipé). Nos estamos refiriendo a…LOS RECREATIVOS!!!!

Nombres tan singulares como Fenoca, Number One, Acuario, Vidal, Patomas, Carim…se han quedado grabados a fuego en nuestras neuronas como las tablas de multiplicar que no pasan del cinco. Pero dejémonos de sentimentalismos e ilustremos a a las nuevas generaciones acerca de estos nichos de felicidad callejera que por desgracia han desaparecido de nuestros barrios para ser sustituidos por locutorios y kebabs. Tiene cojones la cosa...

Un recreativo (o recre) era más o menos un local o bajo comercial de tamaño medio o grande cuyo único mobiliario comprendía una barra donde se alojaba el responsable del recreativo llamado en algunos casos “el jefe”. “El jefe”, dueño o no del cotarro, tenía como única función dar cambio en monedas de 25 pesetas (o cinco duros en el argot) a aquellos chavales que poseedores de monedas doradas de 100 pesetas (o veinte duros en el argot), preferían dilapidar en ocio pasajero cibernético en lugar de ahorrar para vaya usted a saber que menesteres (droga, sin ir más lejos). Otras funciones de “El Jefe” eran encargarse del correcto funcionamiento de los dispositivos electrónicos, pasar un mocho muy de vez en cuando por el local y controlar a la tropa de furibundos adolescentes de tal manera que no deterioraran o deteriorasen el equipamiento del negocio merced a los rabiosos ataques de ira e impotencia que se sucedían frecuentemente. Algunos “jefes” llegaron a implantar un severo código de conducta en sus locales para impedir todo tipo de blasfemias, exabruptos y palabras malsonantes proferidas en el transcurso de las actividades allí acometidas.

Y es que el protagonista esencial de un recreativo eran sus “máquinas”. Llamamos cariñosamente “máquinas” a aquellos armatostes oscuros lacados en contrachapado negro que incluían amen de un práctico apoyacigarros, un monitor telefunken requemado donde la visibilidad plena era una quimera, una pareja de joysticks con sendos botones rojos (con unas connotaciones fálicas evidentes) y un videojuego de 16 bits en forma de superchip (que más que chip era chop) de temática variada y gráficos perruneros. Esta máquina funcionaba a base de dinero de tal manera que por cada moneda que introducíamos la inteligencia artificial (por decir algo) alojada en la tarjeta integrada, nos asignaba un “crédito” o derecho a juego. La intrínseca dificultad del videojuego junto a nuestra probada incapacidad para superar los retos que se nos proponían hacia el resto, y en no más de 15 minutos el crédito se agotaba irremediablemente obligándonos a insertar mas “coins” o monedas para continuar en el juego. La de fortunas que habremos gastado en estas maquinitas del demonio…echen cuentas, echen.

Los adolescentes de la época esperaban ansiosos las novedades en cuanto nuevos videojuegos se refiere y ah! del pobre recreativo que no renovara regularmente su oferta disponible. ¡Podía hundirse en la miseria más absoluta! Hablaremos de la oferta en nuestra tercera entrega, no se preocupen. Por aquel entonces, la chavalería no solo sabía localizar un determinado videojuego en cualesquiera de los recreativos de su barriada, sino también el nivel de dificultad que “el jefe” había preconfigurado en la misma o “cuanto la había picado” así como el nivel de afluencia a la misma.

Pero no todo eran “electronical devicesmy friend, un recreativo que se preciara también tenía hueco para los juegos con solera. Me estoy refiriendo al futbolín y al ping-pong (en menor medida). Juegos para generaciones más viejunas que difícilmente podían subirse al carro de la informática. Y es que el futbolín tenía ese aire romántico y decadente y ese sonido tan característico, entre metálico y punzante, que hoy por hoy sabríamos reconocer con los ojos vendados. Y pocos serán aquellos que no hayan pasado tardes enteras agarrados a los pomos de madera en forma de cipote que gastaban como mandos. Por otra parte, una ventaja primordial de estos dispositivos arcaicos era que por el módico precio de 25 pesetas, hasta 4 jugadores podían beneficiarse de una larga partida. De nuevo, el conocimiento callejero permitía saber que futbolines y de que recreativos, no solo la disposición de los jugadores en el campo defensa-mediocampo-delantera (2-3-5 o 3-4-4 eran las combinaciones más usuales) sino también aquellos futbolines que contenían mayor número de bolas con el fin de prolongar ad nauseam el divertimento vespertino. Únicas reglas a convenir: 1.Prohibido el pase de delantero a delantero, por cabrón, ya que tiene que pegar en la pared primero y 2.Si te quedas a cero goles, la pareja perdedora está obligada a pasar por debajo del futbolín aun a riesgo de recoger con los pantalones la ingente cantidad de mierda en forma de pelusas y colillas que poblaba el bajo de cualquier futbolín. Reglas inocentes que lo único que buscaban era espabilar al personal y no como ahora que los niños parecen subnormales profundos y les engaña cualquiera. La culpa siempre de los padres...

Hay que admitirlo. Como si de una droga se tratase, los recreativos eran auténticas factorías de la ludopatía infantil. Pero no hacían daño a nadie. No conocemos a ningún dueño de recreativo que tras su periplo empresarial se haya convertido en un importante capitoste político, en un socio de Marina D´Or Ciudad de Vacaciones o en presidente de Polaris World. Me atrevería a decir que esta gente no gano dinero con estas iniciativas. Más su único consuelo debe ser que gracias a los “recres”, gracias a esta inmensa y altruista obra social, toda una legión de jóvenes españoles además de ejercitar sus reflejos y agilidad mental a base de quemarse las retinas y desarrollar un síndrome de túnel carpiano, dieron sus primeros pasos en el apasionante mundo de una nueva ciencia, la informática, que iba a cambiar sus vidas en tantos aspectos, que ya nada iba a ser igual.

Lo dicho, mejor estar por las tardes dejándose los cuartos en inocuas partidas de “Bubble Bobble” que estar por ahí jugando con porros o algo peor…


En el próximo post, veremos la curiosa fauna que habitaba en los recres en una nueva nota nostálgica que ya viene siendo habitual en este blog

30.10.07

Capítulo 2: Aquilino y la Mujer fatal

En medio de los incesantes zumbidos subsónicos que su resaca no paraba de enviarle al cerebro y el sonido monótono de la orina repicando en la taza, Aquilino alcanzó a oír débilmente el crujido del viejo ascensor frenando en el piso de la oficina. Y en su interior, se imaginó Polaina, el bellezón extraterrenal de Edelmira Capones, la mujer del todopoderoso Palmiro Tragacete, el constructor más famoso de la provincia. “Una buena forma de empezar la mañana; le podía haber dicho que trajera churros”-pensó Aquilino espolsándose el aparato genitourinario. “Nos vemos luego para asuntos mas profundos”-le espetó a la taza mientras dirigía sus pasos hacia la puerta principal.

Antes de que sonara el timbre, Aquilino abrió la puerta y echó un nuevo vistazo al espejo del recibidor que le devolvía una imagen ciertamente lamentable, una mezcla a partes iguales de profesionalidad, dejadez y restos de resolí. “Esto es lo que hay, al menos por hoy”. Aquilino se olvido momentáneamente de sus pintas y se detuvo en contemplar lo que en ese momento salía por la puerta del ascensor. La pantera era mucho más hermosa en persona, como suele pasar, que en la fotografía del periódico. Lucía un ajustado vestido negro que delataba hasta la última de sus formas. Una larga y estudiadamente descuidada melena cobriza caía tapando parte del rostro ya de por si cubierto por unas inmensas gafas de sol mas propias de una folclórica en horas bajas que de una mujer del pelaje de Edelmira Capones. Aquilino empezó a bajar la mirada para examinar concienzudamente esas Columnas de Hércules que la señora tenía por piernas pero la voz de Edelmira le hizo volver al mundo de los mortales.

-“¿Señor Polaina? Mucho gusto. Soy Edelmira Capones”.
-“Un placer”-dijo Polaina mientras la hacía pasar al interior de la oficina-“Disculpe el desorden pero la señora de la limpieza está...en huelga.”-se excusó Aquilino con la peor de las invenciones posibles. Hacia mucho tiempo que una mujer no pisaba la oficina. Nota mental del día numero 1: Volver a llamar a la hija de la Toñi para que limpiara un poco.
-“¿Algún problema?”-le preguntó Edelmira con cierta tono de incredulidad.
-“Eh! Claro....los sindicatos, ya sabe, que le llenan a la gente la cabeza de pájaros. Que si tienen derecho a cobrar lo mismo que un ministro, un dentista, un fontanero...y si no a la huelga”-En ese momento Aquilino pensó en su difunto padre, delegado sindical de la CNT, que de haberlo oído en ese momento le hubiera arrimado una tollina sin miramiento alguno. “Bueno, siéntese y vaya contándome. Le ofrecería algo para beber pero en la neverita del despacho apenas tengo nada, ya sabe, la mujer de la limpieza que también hacía la compra...”
-“No se preocupe, no quiero nada”. Aquilino respiró con tranquilidad mientras pensaba en la botella de Cinzano del año catapum medio empezada, la garrafa de naranjada Konga de 2 litros desbravada y los dos limones podridos que poblaban su neverita. Nota mental del día número 2: Hacer una compra fuerte en la bodega de Salustiano.

Una vez sentados como mandan los canones de la relación detective-cliente, Aquilino rompió el hielo (again) mientras sacaba del primer cajón de la mesa un boli Bic escribe fino y un cuadernillo Enri de dos rayas (su preferido desde parvulos, manías que tiene uno) de un revoltijo de revista porno viejas y monedas de 1 centimo de euro (mira que no hay forma de colocarlas...)
-“Bueno, usted dirá, recuerde que cobro por horas”. No fue ni acabar de decirlo y ya se lamento de la mierda de broma que acababa de decir, pero la verdad sea dicha, el tiempo apremiaba, más si cabe cuando el bueno de Aquilino todavía tenía asuntos pendientes con el Señor Roca en el cuarto de baño.
-“No me andaré con rodeos, Señor Polaina, pero creo que mi marido me engaña con otra y quiero saber quien es”-dijo con una expresión de rabia contenida la Capones
-“¿Y qué le hace pensar eso?”-preguntó muy profesionalmente Aquilino mientras divagaba como cojones un hombre como Palmiro Tragacete podía pegársela a Edelmira Capones con otra a no ser que ésta otra todavía estuviera más buena, lo cual transformaría este nuevo caso en un desfile de monumentos a la femeinidad difícilmente insuperable.
-“Mi instinto por supuesto. Una mujer siempre sabe que pasa por la cabeza de su marido, aunque él nunca confiese. Eso y su agenda “secreta” olvidada por casualidad en la mesilla de noche”
“Que pájara es esta tía”-pensó Polaina- “¿Y qué es lo que pone en la agenda que tanto le ha llamado la atención”.
-“No es solo lo que pone, es lo que incluye. Varios recibos de luz y agua de un pequeño loft en el centro de la ciudad del que desconocía su existencia, a nombre de mi marido, sin duda alguna, su lupanar, su lugar de encuentro con una zorra detestable cualquiera. Una rompe-matrimonios sin escrúpulos.”

Ahora es cuando Polaina debería soltar un comentario cargado de ironía sobre como el afamado constructor Tragacete se casó en segundas nupcias con la Capones, tras engañar a su primera esposa con esta última. La historia se repite, todo es un ciclo cósmico y bla,bla,bla...pero aunque parezca mentira, se lo ahorró para evitar más que nada perder el jugoso trabajo que se avecinaba.
-“Dejeme esa dirección y averiguare más cosas a ese respecto. ¿Ha ido usted por allí?”
-“Tome. No para nada. Si me encuentro con esa pendona no respondo de mi. Nadie sabe lo que siento ahora por dentro”.
“¡Tranquila leona!”-pensó Polaina.
-“Vamos a ver si ponemos las cosas en su sitio y nos dejamos de zarandajas. El hecho de que su marido pague unos recibos de un pisito del centro no quiere decir que se la estén pegando. Su marido es constructor y sus líos se llevara entre manos...Pero en el hipotético caso que así fuera, usted a mi me quiere únicamente para que le haga un “safari fotográfico” al susodicho...”
-“¿A que se refiere?”-le interrumpió Edelmira.
-“Pues eso, a que vaya al pisito de marras o follodromo con mi cacharra digital, me infiltre en plan “Shinobi”, complete un posado-robado de alto contenido erótico y usted busque un divorcio express con esas fotos incriminatorias, que si no me equivoco le proporcionara unos ingresos como para no tener que pegar palo al agua el resto de su vida...”
-“¿Pero que se ha creido?¿Por quíen me ha tomado?-gritó en medio del despacho con una incredulidad y una ira más falsa que Judas y toda su parentela.
-“Mire bonita (le encantaba ponerse en plan duro), que no es la primera vez que hago estas cosas. Pero no se preocupe, yo encantado. No le voy a poner pegas al asunto. Si es cierto que el hijoputa de su marido ha tenido los arrestos suficientes como para ponerle los cuernos a una mujer como usted, vamos a sacarle hasta el último duro si fuera preciso. Por desgraciao y canalla. Y usted me paga mis honorarios, que por supuesto no dude que subirán una “miaja”, dada la nueva situación y todos tan contentos, ya me entiende.”
El semblante de la Capones cambió por completo, tornándose de una serenidad terrorífica.
-“Esta bien Señor Polaina, veo que nos entendemos. Apunte, entonces: Mi marido sale mañana de viaje de negocios. Va a estar en el extranjero durante una semana. Creo que antes de irse pasará a ver a la niña esta”
-“¿Por qué dice niña?"-preguntó intrigado Polaina
-“Es una niñata universitaria y además pechugona, en la agenda no para de repetirse el nombre de Pepa “Domingas” Albentosa. Conozco a mi marido y se que un par de tetas le pierde. Es un cerdo”.
“A él y a cualquiera, vamos”-pensó Polaina.
-“Déjeme ver esas páginas”- dijo al instante. Aquilino echó un vistazo a un dietario amarillento lleno de anotaciones. Lo primero que le llamó la atención fue la horrenda caligrafía, sin duda alguna el producto ortográfico resultante de un promotor inmobiliario cuasi analfabeto que lo único que había leído en su vida ha sido el "Marca" y los números de los talones de banco en negro. Era curioso. A continuación del nombre de la neumática chavala casi siempre aparecía una anotación en plan “Universidad”, “Facultad”, “Historia”...e incluso en un número de teléfono.
-“¿Ha llamado a este número alguna vez?”-inquirió Polaina
-“Si. Es la secretaria del Departamento de Historia Antigua de la Universidad”-contestó secamente.
“Coño, pues va a tener razón la jodía…esto va a ser bufar y hacer botellas!”
-“Déjeme un teléfono de contacto Sra. Capones. Ya le llamare con lo que surja. De momento creo que tengo por donde empezar. Vigilaré el piso “franco” de su marido a ver lo que cazo. ¿Le importaría que me quede con el recibo? Más que nada por lo de la dirección.”
-“¿Eso es todo?, ¿No va a preguntarme nada más?-preguntó Edelmira
-“Pues para ser sincero por ahora no. Más que nada porque a mi se me van ocurriendo las cosas a medida que pasan, de ahí que necesita su móvil para ir llamándola y por otra parte esta mañana tengo pocas ganas de hablar, estoy sufriendo un proceso gastrointestinal vírico que me está matando. Lo han dicho en el peródico…”
-“Me extraña que no me pregunte por las costumbres de mi marido, su actitud reciente, sus salidas, ya sabe...”
-“No si todo eso está muy bien y en las películas queda estupendamente pero para eso ya esta la policía, para hacer muchas preguntas y no obtener resultados. Que le voy a hacer, yo trabajo así, o lo toma, o lo deja (Dios mio, Polaina que acabas de decir…que la pierdes, moderate!!!)”.
-“Creo que puedo confiar en usted”-concluyó Edelmira con cierta resignación.
-“¿Me permite una última pregunta Sra Capones?”-dijo Polaina
-“Claro, adelante”
-“¿Por qué de todos los detectives de la ciudad ha ido a elegir a un servidor? Que yo sepa nunca he trabajado en nada relacionado con su marido”
-“Tal vez sea por eso, porqué durante todo este tiempo nunca ha estado en la nómina de ese cabronazo”-contestó Edelmira
-“Pues ya va siendo hora de que me conozca...!”. Nota mental del día número 3: La semana antes de Navidad del año en curso enviarle una caja de mazapanes “Esteparios” al Sr. Tragacete junto a una tarjeta de felicitación.

La despedida fue fría y breve. Aquilino ya no sabía como cruzar sus piernas para aguantar el torrente sólido-gaseoso que luchaba por salir de su cuerpo. Una vez cerrada la puerta de la oficina, corrió como una exhalación a la Capilla Sixtina de la higiene personal para retomar sus abluciones. Mientras entraba en comunión con la naturaleza, pensaba en su siguiente movimiento. Por un lado podría hacer una visita en lo que quedaba de mañana al apartamento donde supuestamente Tragacete se reunía con la “pechugona” becaria. ¿Quién sabe? A lo mejor se los encontraba en plena faena y en cuestión de unas horas le daba matarile al asunto. Pero también es cierto que si en el piso no había movimiento se iba aburrir como una ostra. Si al menos localizara a la chavala en el Campus para poder seguirla…fue entonces cuando la segunda opción se plantó en medio de los retortijones como un relámpago en medio de la tempestad…”¡coño, si puedo echar mano de Antoñito Galvez para que me ayude a localizarla1”. ¿Qué quien era Antoñito? Uno de los profesores titulares de Historia del Arte de la Facultad, un viejo amigo de Aquilino, compañero de chamelo y camarada de correrías. Todo un personaje…más murciano que “El Bando de la Huerta” y el Zarangollo juntos. ¿Universidad o apartamento? Para cuando Aquilino cerraba la puerta del despacho mientras jugueteaba con las llaves del Renault Cinco Copa Turbo, la decisión ya estaba tomada.


20.9.07

¡¡LAS INCREIBLES (Y NO MENOS ROCAMBOLESCAS) AVENTURAS DE AQUILINO POLAINA, DETECTIVE PRIVADO!!

El primer relato interactivo de Interné (porque yo lo digo)

Los rayos de ese sol tan característico del Levante español, lease molesto, caliente y jodón, atravesaron a una velocidad ciertamente cercana a la de luz, las abolladas laminillas de la veneciana del todo a 100 que hace un par de años tuvo a bien instalar el primo de Aquilino a cambio de un almuerzo consistente en quinto de Mahou con pincho de tortilla reseca, incidiendo súbitamente en la cara adormilada del detective Polaina, el cual hasta ese momento dormitaba extendido todo lo que es él, en la otrora mesa del despacho, actual cama improvisada, recuperándose de la temible curda de la noche anterior en el bar de Jero, agarrada a base únicamente de Resolí de Cuenca con denominación de origen “productos de Castilla La Mancha” y platos de tramusos. Y es que si en una cosa Aquilino Polaina destacaba a la hora de tajarse, era en no mezclar bebidas distintas, sabedor de las terribles resacas que podía causar esta maléfica práctica. Otra cosa es que el brebaje conquense estuviera compuesto por un mejunje de crema de café, anís y coñac a partes iguales…


Un eructo inhumano proferido desde las mismísimas entrañas del gaznate de Aquilino, mandó a freir gárgaras cualquier signo de tranquilidad y sosiego que hasta la fecha había morado en la estancia. Como si de un viejo dinosaurio afectado por artritis reumatoide se tratase, Aquilino desplegó toda una serie de movimientos carentes de ritmo con el único fin de ponerse en pie, cerciorarse de su existencia como ente físico y caminar poquito a poco hacia la letrina del despacho con el objetivo inmediato de vaciar su vejiga al precio que fuera amén de otros menesteres.

Mientras caminaba torpemente por la habitación hacia el ansiado “Castillo de las baldosas de porcelana y pila de formica”, sus ganas de miccionar aumentaron peligrosamente. Aquilino se mordió con fuerza el labio y emitió un extenso gemido inaudible para el espectro auditivo humano, como si la propia vida se le escapara por la boca…y el orín por la uretra.

De pronto el timbre de la puerta del patio sonó con su agudeza de costumbre. “Cagon Chichiputi, ya se han equivocado otra vez; El novio bacalaero de la hija medio mongólica de la maruja adicta al Valium del 5ºC…en fin yo a lo mío”, pensó Polaina mientras encaminaba de nuevo sus pasos hacia el Sancta Sanctorum del aseo personal. Mientras traspasaba el umbral del Templo de la Defecación, un segundo timbrazo, más sostenido en el tiempo, puso en guardia a Aquilino. “Mira que si es para mi…¿Y quien coño puede ser ahora, un domingo por la mañana? Nada, nada. El novio con el pelo a lo cenicero, que no da para mas, el tío capullo…”. El tercer timbrazo, largo, eterno y estridente, desconcentró por completo a un Aquilino que comenzaba a bajarse los pantalones ordenadamente para comenzar las maniobras de aproximación a la “sima” de Roca. “Mecagüenlapenanegra….Me han cortado la meada! Así como no se van a formar piedras en el riñón…Como sea algo de propaganda no les voy a comprar una mierda hasta el Día del Juicio Final…por la tarde!!”

Cabreado y con sus fluidos elementales todavía revoloteando en su interior, Aquilino Polaina, en un momento repentino dejó atrás su torpeza etílica y pegando tres grandes zancadas se plantó en el telefonillo del recibidor, asió la góndola y pronunció un gruñido ininteligible en el que se intuía algo así como un “¿si?”. Le contestó nna voz femenina, dura pero tremendamente atractiva que susurraba: “¿Sr. Polaina? Necesito hablar con él”. A lo que Aquilino contestó rápidamente con una voz aclarada tras los pertinentes actos previos de tragarse un par de “pollos”: “Servidor. La agencia está cerrada hoy, vuelva mañana. Adiós”. De nuevo la voz insistía, inmutable: “Necesito hablar urgentemente con usted, se trata de negocios…y solo usted puede ayudarme”.

“¡Que pesada es la gente!”, pensó Aquilino. Y dado que si algo aprendió de sus padres era a ser honesto, no dudo ni un ápice en contestar lo siguiente: “¡Señorita me estoy mingitando en mis adentros. Y si no miccionó ahora, de aquí a unos años tendré un calculo de Resolí en mi riñón del tamaño de la Casas Colgantes de Cuenca! Vuelva usted mañana, hágame el favor.”, justifico el bueno de Polaina, evitando en todo momento emplear las conjugaciones del verbo “mear” para procurar no parecer malsonante. La voz de la mujer calló durante unos segundos. Aquilino respiró tranquiló y de nuevo dirigió la mirada a esa taza que le esperaba con la boca abierta y no precisamente la del desayuno. La voz de la mujer fue inflexible: “Soy la esposa de Palmiro Tragacete, el constructor. Y tengo dinero suficiente como para poder extirparle la “Ciudad Encantada” entera de su riñón si fuera necesario. ¿Ha quedado claro Sr. Polaina?”.

Aquilino ignoró por espacio de microsegundos la indirecta, recupero momentaneamente la cordura y echó un vistazo fugaz al periódico de hace unos días que estaba en la mesilla del recibidor. En la foto de la primera plana, Toribio Castañas, el Presidente Autonómico, un cateto pueblerino que había llegado lejos a base de dejar robar al personal siempre y cuando se le reservara la comisión de marras, le daba la mano a Palmiro Tragacete, uno de los mas importantes constructores de viviendas, apartamentos, chalets, chamizos y barracas varias del Levante español, y en resumidas cuentas, otro cateto pueblerino que había llegado lejos a base de robar al personal y repartir las comisiones convenientemente. Acompañando a la feliz pareja en la inauguración del nuevo Centro Comercial “La Alberca 2000”, uno de los más grandes de Europa, toda una cohorte de pelotas oficiales (más o menos los de siempre) y concejales varios formaban un magma indefinido de piratas y filibusteros estrenando su nuevo barco donde practicarían sus fechorías. Y justo en el extremo izquierda, el más bello mascarón de proa de la nave, una imponente figura femenina, con mas curvas que una etapa del Tour de Francia, que intentaba pasar desapercibida sin conseguirlo: Edelmira Capones, la mujer del insigne constructor. “No llegaría a los 35, fijo.”-pensó Polaina-“Y Tragacete ya hace unos años que paso de los 55…los hay con suerte, no solo es guapa la jodía sino que además tiene labia”.

Aquilino necesitaba el dinero. No corrían buenos tiempos y aunque no tenía deudas, la ocasión de cerrar una buena operación con la mujer de Tragacete era un negocio demasiado goloso para dejarlo pasar. Pero por otra parte, si le hacia subir, difícilmente podría dedicar esos quince minutos necesarios e imprescindible a las abluciones corporales (tanto líquidas como sólidas) que su cuerpo le pedía en ese momento de forma incesante a base de retortijones y gases. El día empezaba con una dura disyuntiva: O cagaba o trabajaba.

A partir de aquí, espero que mis abultada nomina de lectores decida por si mismo el camino de nuestro héroe, ya sea permitiendo el encuentro con la femme-fatale (y con todas las consecuencias que ello conlleve) o bien recluyéndolo en el Templo del Gres por tiempo indefinido a la espera de nuevos acontecimientos.

En aras de un comportamiento democrático, se hará lo que diga la mayoría. Por supuesto. Ustedes tienen la palabra.

7.9.07

Aquellas Maravillosas Gasolineras..."Rarities Gold Box"

¡Buenos días, mis queridos lectores!

¿Qué tal ha ido el veranito? ¿Bien? Espero que hayan cargado a tope sus ya maltrechas baterías. Yo por mi parte, y dado que mi mente ya esta lo suficientemente ejercitada, me he dedicado a cultivar mi cuerpo con el video de Aeróbic “Let´s get physical with Bertín Osborne” y así me he puesto. Para mojar pan, vamos. Vean, vean...


¡¡Buenas noches, señoraaaa...buenas noches, señoraaa....hasta la vistaaa!!!"


A lo que íbamos. ¿Acaso creían que les iba a dejar en la estacada tras los insuperables “Aquellas Maravillosas Gasolineras, Cara A y B”? Por favor. Una ya sabe lo suficiente como para entender que cuando el pueblo llano quiere rosquillas, hay que dárselas lo más redondas posibles. Cuando ya pensaban que estaba todo dicho al respecto, cual rastrera empresa discográfica, va y me saco de la manga este corolario final al que he decido titular “Rarities Gold Box” o algo así como “Últimos saldos”. Disfruten este particular regalo “vuelta al cole” que les he preparado...

Arévalo canta. Por si fuera poco con sus chistes de gangosos y mariquitas ausentes de gracia y/o comicidad, algún desalmado decidió poner a Arévalo a cantar y el subengendro resultante fue este. No queremos imaginar el resultado de la versión de “Pedro Navaja” pero alcanzo a imaginar a este inefable humorista que es Arévalo con su tono gangoso cansino cantando aquello de “Pedddrrro NNNavvvahhha, cuchilllllo ennnnnn mmmmaannnnooouuu y unnnna mujeerrrrrr”...¡así se hace!¡destrozando los clásicos!.


Bocata´s. ¿Alguien sabe que coño pinta aquí el genitivo sajón? Supongo que de nuevo el atractivo mercado internacional anglosajón, claaaaro! Radiografía del grupúsculo. Estilismo puro 80, ellos tumbados en un suelo de colorines con los chándales de mercaito mas cantarines que pudieron encontrar, los calcetines bien subidicos hasta las rodillas y siempre por encima del pantalón, y como no, esas sutiles hombreras (ver el tipejo de la derecha) que tanto furor causaron aquellos años. Hoy en día esta moda ha intentado borrarse de las hemerotecas y son muchas las mujeres de 30 años que queman en enormes piras funerarias sus fotos de instituto cuando rivalizaban unas con otras por el tamaño de tan preciado apéndice textil. Nota melancólica: Se de algunas que incluso se colocaban dos o más hombreras apiladas y asidas por la goma del sujetador, adquiriendo una fisonomía más próxima a la de un culturista desproporcionado. Volviendo a Bocata´s y mirando de nuevo la portada...¿ustedes creen que esta gente iba en serio?


Teen Boys. “Siempre”. Al Cesar lo que es del Cesar. Ni son “teen”, ni son “boys” y más que “siempre” yo a estos fulanos no los querría escuchar “nunca”. La portada ante todo es un ejemplo de hasta que punto, el hijo de uno de los integrantes del grupo puede diseñar una portada tan cutre con el “Neopaint” de Windows. Las estrellitas, el planeta Tierra y los dos fulanos con sendas camisas insufribles regalo de la abuela el día de Reyes. Me gusta el gesto de cogerse del hombro. Delata complicidad. Algo así como “si hacemos el ridículo lo hacemos juntos”. Pongo la mano en el fuego a que son cuñados. Fijo. El calvo podría haberse puesto peluquín. O que pintaran algo negro en su cabeza con el “Neopaint”.



Alejandro Magno. “Los chulos son pa cuidarlos”. El artista de la portada es un joven cantante español en su disco debut que PARA NADA tiene que ver con el archiconocido cantautor de prestigio Alejandro Sanz. Repito, PARA NADA. Cualquier relación con uno de los mejores compositores de música en español de la actualidad es PURA COINCIDENCIA. Alejandro Sanz jamás de los jamases se prestaría a vestirse de torero homosexual con una florecilla acid house para la portada de su primer disco. Dios nos libre. ¿Y que es eso de “Los chulos son pa cuidarlos”? ¿Acaso el bueno de Alejandro Magno se está refiriendo a “su chulo”? ¿A ese que lo tiene contentito de cintura para abajo amen de llenarle la nevera con leche, carne y huevos? ¡¡Que no, que no y que no!!. Que este tiñalpas amariconado no tiene nada que ver con el pedazo de artista que es Alejandro Magno, perdón, Sanz!! (todos tenemos un pasado...)


Richard. Single clásico donde los haya de un tío que conocen en su casa a la hora de cenar. De “El Richal” me gustan esa sonrisa de oreja a oreja que prueba que estamos ante un tío “jachondo” y un “viva la virgen” y esa pedazo de melena, ese pelazo, ese “matto grosso” que luce en su cabeza con esas patillas modelo “contrabandista”. Ni que tuviera un gato muerto en la coronilla...
Antonio Gonzalez “El Raya”. “El toreo es como un cante”. ¡Que jeta la del bueno de Antoñito!. Se hace una foto con el famoso diestro de Ubrique, “Jesulín” a la salida de un cuarto de baño y cuando le preguntan que portada quiere poner en el disco, el tío ni corto ni perezoso arrea la del torero para aumentar las cifras de venta. Me quedo con las pintas de “El Raya”, a saber, peinado con raya el medio (de ahí el mote) de chico bueno y conjunto chaqueta-camisa-corbata de cateto de pueblo que va a un banco a pedir un préstamo para comprarse la Mobylette Campera...“Es que si le pongo unas agüerillas de esparto a cada lao me viene de fábula para cargar las albaricoques, Señor Director”...



Ginesito. “Un canto a la vida y a la naturaleza”. “El mas amable de los payasitos”. Si...y también el hermano amable del payaso de “It” de Stephen King!!. ¿Ustedes dejarían sus hijos en una fiesta de cumpleaños a cargo de este fulano? Un tipo que en la portada del disco deja claro lo siguiente y copio textualmente...”¡Hola Amiguitos, bienvenidos a mi fiesta que es tu “gran fiesta” de hoy. Estoy seguro que lo vas a pasar “fenomenal” y un besito para ti”. ¡El besito mejor se lo das a tu puta maXXXe! Menudo payaso “perillitas”. El tío, eso si, es todo un profesional y deja bien claro en la portada que tanto los dibujos, los comentarios como las canciones son obra del insigne Gines Corbalán, su alter ego cuando no se viste de capullo pederasta.



Este si que es un artista de tomo y lomo. ¡¡GEORGIE DANN!!! Aquí le tenemos en su correspondiente “Greites Jis”. Resulta que el bueno de François Miterrand (el ex Presidente Francés) además de apoyar las nobles acciones de sus agricultores cuando nos volcaban día si, día también los camiones de frutas, allá por los 80, buscaba un arma definitiva que exterminase a los infectos españoles y los borrara de la faz de la Tierra por guarros, cochinos, peludos y viriles (al menos más que las mariconas de los franceses). Así surgió el proyecto nombre en clave “Georgie Dann”. Este tío (francés a la sazón) torturaba sistemáticamente todos los putos veranos a los españoles con sus tonadillas repetitivas, machaconas y pueriles. ¿Acaso no se acuerdan de morralla tal como “El Chiringuito”, “La Barbacoa”, “Mami que será lo que tiene el negro”, “El Negro no puede”...? ¡Si todas sonaban igual, que leñe no se van a acordar! A lo que íbamos, que estuvo a puntito de lobotomizarnos si no llega a ser porque lo expulsamos del país por pesado...a tiempo. Me quedo con el baile del colega. Ese movimiento frenético y arrítmico de hombros más propio de un síndrome neurológico que de un baile.

El mismo desalmado que tuvo bemoles suficientes como para producirle un disco a Arévalo, demostró que además los tenía bien puestos cuando se sentó en la mesa de mezclas con “Los Hermanos Calatrava”. Los Hermanos Calatrava (para nuestros lectores más jóvenes) eran, supuestamente, un dúo humorístico venido de Andalucía. Ergo, tan solo por su procedencia ya tenían que hacer gracia por cojones. Y es que mis queridos lectores, si algo tienen que tener los andaluces es “grasia morena” con ese acento tan característico del que hacen gala, y las sevillanas y el flamenco y el fino y el “pescaito frito” y todos esa sarta de topicazos tercermundistas. Y además “una grasia que no se pué aguantá”. Son los payasos oficiales del estado español por Real Decreto. Luego pasa lo que pasa. Que a veces, tan solo en contadas ocasiones, te encuentras con andaluces que por una especie de maldición divina, pues no hacen reir lo más mínimo. Este era el caso de “Los Hermanos Calatrava”. Su humor era sencillo, minimalista podríamos decir. Dos hermanos, uno supuestamente guapo y otro marcadamente feo. El supuestamente guapo era serio, educado y formal y el feo era feo, horrendo y subnormal (¿he dicho que era feo?). La base del chiste (si podemos llamarle chiste...) es que el feo tenía un cierto parecido (traído por los pelos) con Mick Jagger (en la portada, es el de la izquierda, juzguen ustedes mismos). Es decir, una boca grande y muchas arrugas en su cara. Ahí se acababa el parecido. Como digo el chiste era que el supuestamente guapo entrevistaba al marcadamente feo haciéndose pasar este último por Mick Jagger y todo ello sazonado con expresiones en “inglés de los montes” en plan “wuanchufrí” y “achilipun”. Parece mentira que la cosa diera para más, ¿verdad?...pues esta soberbia estulticia les dio de comer muchos años. Para que vean. El tiempo (como siempre) fue implacable y al envejecer, el supuestamente “guapo, sobrio y formal paso a “hombre mayor (feo) con cara de mala hostia” y el marcadamente feo paso a “pellejo informe y aberrante, horrendo y subnormal”. No he oído el disco en mi vida, pero como comprenderán uno tiene cierta salud mental que quiere conservar.



Pancho y Javi. “Bueno para ti, malo para mi”. Señoras y señores, un poquito de respeto que “Chanquete ha muerto”...pero que desgracia que no se llevara a la tumba a estos dos cagabandurrias...Pancho y Javi, Javi y Pancho, los eternos protagonistas de la resobada “Verano Azul”. ¡La de corazones de quinceañeras que habrán roto! ¿Se acuerdan de la serie? Daría sin duda para un nuevo post integro. Pancho y Javi se suponen que eran los guaperas del cotarro y no paraban de tirarle los tejos a Bea, una estrecha de la capital, tonta y creída y a la que además no le baja el cuerpo hasta bien entrado la mitad de la serie en aquel capítulo memorable con final “happy ending” todos corriendo de la mano por la playa en plan “ya soy mujer y mis amigos me aceptan aunque sangre a chorro cada mes”. Pero no nos vayamos por las ramas y volvamos a la portada del disco. Pancho y Javi con chandals (de mercaito, como no) se hacen una foto delante de una sabana sin planchar. En ese momento la vida les abre las puertas de par en par. Javi ahora es actor en “Policias” y Pancho estuvo una temporada en el bando de los “Politoxicómanos”. ¡Que perra es la vida!


Las Viudas. “Grandes éxitos”. Jaaarl!!. No todo iba a ser portadas de freaks horrorosos y viejas leyendas haciendo el canelo. Alegren un poco esa cara con las turgentes y sinuosas curvas de “Las Viudas” en lencería fina y sus canciones picantitas y subidas de tono...”Tocame el piripipi”, “Saca la mano Antonio”...De la primera hasta todavía me acuerdo del estribillo (cosas de la memoria de uno que en un ejemplo más de lo decadente de su funcionamiento es capaz de guardar almacenado chorradas como esta en lugar de sonetos de Lope de Vega): “Tocame el piripipi, tocame el piripipi, que si tu no me lo tocas, te lo tocaré yo a ti”. ¿Y me preguntan que es poesía? Poesía es esto. Lo demás son todo eufemismos y salidas por la tangente. Creo que ahora son todas cajeras del “mercadona” o dependientas en una mercería o “algo peor”.



2 Toros 2. Cógete a estos. El Modern Talking español. El otro día fuí con esta foto a mi droguería favorita en busca de un tinte para el pelo con la misma tonalidad que las melenas de estos dos “toros” para hacerme una mechas. Cual sería mi sorpresa cuando el encargado me dijo que esta gama cromática ya no la fabrican porque uno de los componentes es muy caro de conseguir. ¿Qué de que componente se trata? Del tegumento testicular de dos efebos andróginos...o sea, ¡¡De los huevos toreros de estos dos maricones de la portada!!! El de la izquierda parece el croupier del Casino Monte Picayo y el de la derecha el “segurata” de Distrito 10 con esa americana en tono bronce tan matadora. Si alguien los ve en la calle y los reconoce, por Dios que los mate (a ser posible mediante descabello) no sea que quieran volver a reunirse. Aunque quien sabe, esta gente ha cambiado mucho. Ahora a lo mejor son gerentes de empresas discográficas, vendedores de seguros o “algo peor”.



Los Golfos. “Que pasa contigo tío”. El nombre les viene al pelo, porque la jeta de golfos no se la quita ni la madre que los parió. Estos gañanes tienen toda la pinta de ser los más cabroncetes de su grupo de Juniors, ya sabe, los que ya beben calimocho por las noches, fuman “hierbas del campo” y se meten en las tienda a zurrarse la sardina como posesos...usted ya me entiende. La cancioncilla seguro que la han oído (fue la banda sonora de la peli “Muertos de Risa” de Alex de la Iglesia). Pero yo me quedo sin duda con la advertencia de “Disco prohibido en USA”. Me parto. Seguro que fue idea de los mismos chavales. ¡¡Que malas sombras!! Seguro que en la actualidad son maléficos y perfidos y trabajan de inspectores de Hacienda, profesores universitarios o "algo peor".


Pepe Domingo Castaño. Si, señores si. Este tío este Pepe Domingo Castaño. Uno de los locutores radiofónicos con más solera de este país. Comentarista del mítico programa “Carruseeeeeeel Deportivo”. Mis recuerdos de domingo por la tarde es estar en el coche de mis progenitores rodeado de abuelos y hermanas, embutido en el sillón de eskai (with diamonds) en medio de un atasco entrando a Valencia, todo ello sin aire acondicionado, climatizador ni abuela que lo crió, escuchando “Carruseeeeel Deportivo”. “¡¡¡Gol en La Condomina!!!, ¿Qué haces que no fumas un purito Reig, puritos Reig!!, ¡¡Thermidor, el reloj de los que si que saben!!!”. Deliciosamente insufrible. Y esa voz tan tabarrera de Pepe Domingo Castaño...daba sueño. Aquí lo vemos con un señor pelazo (que todavía conserva aunque blanco), gafas de pasta modelo Telefunken, camisa rosa pálido con chaleco azul a juego y colgante tribal que no evitan esa cara de estreñido que tiene. Discos BELTER a la producción. Sello de calidad.




Tope. “Tu me vas”. Morralla pura. 5 amiguetes que trabajaban en un taller de camiones Pegaso y les dio por la música, como les pudiera haber dado por vender droga o el proxenetismo homosexual. Que cuadrilla. Me quedo con el elemento discordante, el segundo por la derecha. Bajito, pelo afro y con bigote, que se niega a realizar la misma pose que el resto y al que el mono le queda siete tallas mas grande...con cara de no saber que puñetas hace ahí. Seguro que piensa “ojalá no me vea ni madre, que vergüenza...”. Te comprendemos.


Murdock el loco. “ComAndo”. Que el “Equipo A” fue una serie que nos marcó en nuestros años mozos a todos resta decirlo. Que en España hay productores musicales que en cuanto ven “pela” de por medio son capaces de vender la honra de su hermana también. Ese fue el ejemplo de este grupúsculo en el que queda de manifiesto lo fácil que es emular a tus héroes favoritos entre cuatro amigos con cuatro duros. El que tenga la tez mas morena, ya sea por que tenga los rasgos mas agitanados o bien por que trabaje en la obra y goce de ese bronceado paleta tan característico lo disfrazaremos de M.A. (o Mr. T). Para pulir un poco más, le raparemos el pelo a lo cresta y le pondremos las alhajas del ajuar de nuestra abuela en el cuello. Eso y un chaleco vaquero desvencijado bastará. Hannibal será el bajito, solo que le pintaremos el pelo de blanco con kanfort para los zapatos y le daremos un puro y un chubasquero descolorido (todo eso y que repita muchas veces lo de “me encantan que los planes salgan bien”). Para Murdock y Templenton Peck lo tenemos fácil. Los dos que sobren se ponen sendas chupas de cuero de Catadau-Llombay a ser posible perrunas. El más feo o calvo se encasqueta una gorra de la Caja Rural de la Valencia Castellana y hace un poco más de pirado. El más guapete pone cara de interesante con mirada irresistible. Y ya está, “Equipo A” listo para contratar.



Nos despedimos con uno de los que hasta hace dos posts era uno de los grandes desconocidos de la Música Española. Me estoy refiriendo a “TONY EL GITANO”, si, “Chewbacca con traje alpaca”. El rey de la rumba canalla, arrabalera y de bajos fondos. Y para que encima no les sepa a poco, adjuntaremos dos discos suyos. “La Neuralgia del Trigemino” ya demostró que Chuck Norris nació sin barba. Pues ahora, aportaremos las pruebas de que Paco el Gitano no solo no nació sin barba sino que se atrevió a permutar su sempiterno traje de alpaca por un modelo mucho más atrevido y en consonancia con la moda de la época. Vean los cuellos de la camisa y disfruten como enanos.


Cerramos eso si, con una bella estampa familiar de TONI (ya con su estilismo habitual, muy a la Johnny Cash, todo de negro y fumando un pitillo) acompañado de sus dos hijas gitanas vestidas en plan “vaporoso” (le hacían los coros), cantando temazos (mejor dicho himnos) como “A Barcelona” (mucho antes que el Mercury y la Caballé hicieran lo propio) y “Maldita Droga”. Desde esta, su web amiga, nos quedamos con este gran mensaje que Tony, un personaje vapuleado por la vida y sus circunstancias, nos dejó en este disco.


“Chavales, no fuméis porros que eso es malísimo para la salud; que se empieza con los porros y se acaba con “algo peor”.”

3.8.07

Aquellas Maravillosas Gasolineras...(Cara B)

Retomamos la saga “Aquellas Maravillosas Gasolineras”, recordando lo mas bizarro de aquella, nuestra infancia, rodeado de sueters de cuello cisne, pantalones de pana y posters de Espinete…

La Cara B siempre ha sido sinónimo de “rareza”, de “experimentación”, de “vanguardia”…veamos el porqué.
El primero de la terna, el inefable Isidoro, que en su maxi casette “La Canción del Pensionista” realiza un sentido homenaje a todos aquellos autobuses de jubilados/as que diligentemente el gobierno se encargaba de despeñar por los acantilados y barrancadas de la geografía nacional en aras de reducir la partida presupuestaria correspondiente a las pensiones. Para ellos, que mejor que morir mientras su vehículo se precipitaba al abismo, cantando las viejas tonadillas de ayer, hoy siempre.


Volvemos al campo de la “rumba canalla” de la mano de La Pelua (suponemos que una derivación insana de La Peluda) con su hit “Gazpacho fresco”. Aquí la tenemos en la portada del disco homónimo, fea como la madre que la parió. Con ese vestido de galas de verano por los pueblos de Cuenca, todo revenido, y esa mata de pelo ondeando al aire, que cual Sansón otorga la fuerza que “La Pelua” derrocha en los escenarios. Del tinte hablamos otro día. Malas lenguas sostienen que el sobrenombre cariñoso de “La Pelua” tiene su origen en la pilosidad natural de la artista y no precisamente en su zona capilar…vamos, para comerse su “Gazpacho fresco” estamos…




Lauren Vera. Genio y figura hasta la sepultura. Aquí le tenemos acompañado con la Orquesta de Argimiro Sampedro, nada menos. Y ustedes se preguntaran ¿quién coño es Lauren Vera y quién coño es Argimiro Sampedro? Ni puta idea. Quédense con la estampa porque no tiene desperdicio. Lauren Vera vestido como el hijo mongólico de los Cartwright de Bonanza, con la camisa bien despechadita y el sombrero de cuatrero, acompañado de su fiel pastor alemán (de nombre Tarzán, Sultán o Cazán, no falla) y de fondo una calle sin asfaltar de vaya usted a saber que pueblo inmundo de la meseta castellana a eso de las tres de la tarde cuando todo hombre de bien está haciendo la siesta. ¿Y la orquesta de Argimiro? Pues durmiendo la siesta, coño. Yo es que cada vez que veo la foto me entran unas ganas de echarme en la cama…Que ponientazo!!



Modalidad: Canción Ligera. Pais: España. Interprete: Patricia Santos “La tumba-hombres”. Tema: “Saca la mano Mariano”. Y ahí esta Patricia presentándose en sociedad con una falda bien cortita a punto de mostrar el matojo, que el manager le dijo que esa queda muy bien de cara a los fans, lo de “insinuar” sin “enseñar”. Lo del mote “La tumba-hombres”, mejor no explicarlo pero pueden hacerse una idea de lo que era capaz la buena de Patricia por agarrar un micrófono y hacer lo que más le gusta…cantar, por supuesto. Una artistaza.


Bueno. Agárrate que vienen curvas. Los Dos Españoles y su disco “Entre Mexico y España”, editado por Belter (eso ya era un mínimo de calidad). Estos en realidad eran dos cuñados que se fueron de viaje con las parientas a Punta Cana. Tanto les gustó el ambiente que se juraron entre ellos grabar un disco a la vuelta ensalzando las virtudes del paraíso que habían visitado. Incluso uno de ellos tuvo los huevos toreros de salir en la portada con el gorro que había comprado de souvenir. También había comprado de souvenir un mostacho postizo típico pero no se lo puso debajo de la nariz como era preceptivo, sino encima de los ojos y así ahora podemos confundir ese bonito recuerdo con una fea y antiestética ceja que va de oreja a oreja. Desengáñense, es un bigote postizo. Ningún ser humano tiene las cejas así. Y si las tiene es que no es un ser humano.

Estos si que son la bomba de la peña “extremeña”. Los Pillo´s Boys. En versión original nada menos, rechace copias. El disco está producido por Producciones Extremeñas, ahí es nada. La cara de catetos de estos dos es deliciosamente sublime. Para mi que eran dos compadres camareros de la Tasca de la Cooperativa del pueblo que decidieron grabar un disco para regalárselo a las parientas. Estos son mas de pueblo que San Isidro y San Antonio Abad juntos. La camisica verde bien abotonada hasta arriba no sea que se resfríe uno, la cara de bonachones y buenas personas, ese nombre artístico con gancho usando el genitivo sajón, buscando, sin duda, el atractivo mercado internacional…Ah! Pillo´s Boys, quien os pillara en una verbena, ¡no cambieis nunca!


¡Coño!, ¡el cantante de Parchis, Tino! ¡Y en su álbum debut en solitario!. Lo que hace el hambre. Miren que pose para poner “chochonas” a las fans adolescentes…tumbado a la bartola, sobándose la panza en plan lujurioso con el polo de Lacoste que ha pasado de color blanco a color hueso de lo resobado que está. El pantalón corto vaquero, las piernas depiladas, las tenis J´Hayber y los calcetines blancos con raya violeta. No se si pondría cachondas a las mozuelas de la época, pero me se de unos psicópatas pervertidos que al contemplar tan erótica estampa y contemplar el título del disco “Por primera vez”, correrían raudos a sodomizar al Tino este como se merece…Este chico acabaría realmente mal, porque luego no se le ha visto por ahí hacer nada. A lo mejor está en el mismo bar que en el de Las Gemelas Fantásticas, mira tu por donde. Con el culo como la bandera imperial japonesa.



Pero dejémonos de historias tristes y sonríamos de nuevo a la vida y al amor con un duo de cantantes con un claro déficit de secreción de testosterona y hormona del crecimiento: Los Toretes y su "¡caramba, niña!". Que jovialidad, que simpatía, que pequeñetes que son y que poquita cosa. La encarnación de Zipi y Zape en la Tierra con esos chalecos rojos y sus corbatines. A destacar el tema “Que importa la raza”, en una clara alusión a la igualdad de derechos que reclaman desde siempre, bajitos subnormales como Los Toretes. ¡Seguid buscando vuestro arco iris!

Otro duo musical de infausto recuerdo fue el de “Toni y Susi”. Aquí los vemos ataviados con sus mejores galas (dos smokings alquilados por supuesto) en su disco de presentación. ¿Quién de los dos era “Susi” y a que santo ese nombre? Las canciones no tienen desperdicio. “Navalmoral de la Mata”, “Soy Extremeño” (que tienen los extremeños para ser tan prolíficos en cuanto a música de serie Z se refiere, ¿qué acaso allí no llega la radio y tienen que cantarse los unos a los otros?), “Manolete y Joselito”…creo que no lo había dicho, pero Toni y Susi son cuñados. Fijo.


Hablar de Toni El Gitano es hablar de “cintas de camionero” con letras mayúsculas. Toni el Gitano es el rey de la rumba macarra y taleguera desde hace 25 años en España. Este fue su primer disco, sin duda alguna premonitorio de lo que luego vendría. Tony, conocedor de las cloacas de la sociedad nos muestra un fresco desalentador donde el temible mundo de las drogas hace mella en las relaciones humanas. Vamos, que habla de lo que pasa en su barrio con el jaco en canciones míticas como “Me fumao un canuto” (transcripción fonética de “ME-HE-FUMADO-UN-CANUTO”) y “Se pinchaba la niña”. ¿Y que me dicen de la barba cardada? Si parece Chebwacca con un traje azul de alpaca…


Nos despedimos con el que sin duda es uno de los mejores discos de gasolineras. Me refiero al inigualable, al incomparable, al insustituible, Jose Angel y su temazo “Madre, soy cristiano homosexual”. Por favor, antes de extraer conclusiones premeditadas analicemos pormenorizadamente la portada. Jose Angel es un maricón que quiere decirle a su progenitora que “el le tira a los palomos” (para entendernos). Para ello no solo emplea su voz como herramienta sino toda una serie de elementos propios de la comunicación no verbal cuyo fin es el de reforzar el mensaje subyacente. Así, Jose Angel viste una camisa floreada impropia de un varón heterosexual, junto a un pantalón blanco de primera comunión a punto de estallar que embute sus rollizos perniles. Los zapatos, de piel de faba de cochero color beige clarito, tipo mocasín con calcetines a juego con el color de su ojete, conjuntan a la perfección no solo con el Casio Telememo de su muñeca sino también con el moreno cangrejo que luce en su epidermis. Jose Angel esta algo orondo, o como se ha dicho toda la vida “esta hermosismo”. Prueba de ello es su cara, gorda y redonda como una hogaza de pan, y unos dedos de la mano como porras. La pose, sentado con las piernas cruzadas en un rasgo adicional de homosexualidad latente y la expresión facial de subnormalidad profunda (pero cristiana) junto al atrezzo escogido (un butacón playero forrado y un jarrón chungo de terracita de verano) forman un conjunto semiológico de potente significado. Vamos, que a la madre no le hace falta escuchar la canción para saber que su hijo es una “locaza” y una “petarda” de tomo y lomo. Podría ser peor, señora, podría ser un ladrón o un traficante de drogas. No se amohine. Al menos es cristiano. Es un bonito contrasentido.

Un consejo final. Pueden ver que el disco de Jose Angel esta grabado en Stereo. Es decir, su mensaje de mariconeria esta registrado de tal manera que permite separar estereofónicamente los sonidos por ambos canales siempre y cuando dispongan del equipamiento adecuado. No renuncien a disfrutar de Jose Angel con la calidad que se merece.

De Jose Angel (y otros) han dicho…

“Jose Angel ha sido una influencia tan capital en nuestra música que no me imagino “OK Computer” sin él. Si analizamos este último acorde por acorde, posiblemente sea un plagio flagrante de “Madre, soy cristiano homosexual”. Tom Yorke de Radiohead.

“Jose Angel fue el primer músico que lucho contra el sistema opresor. El primero que se levantó contra los convencionalismos imperantes en la sociedad. Marcó el camino para toda una legión de músicos soplagaitas y quejicas entre los que nos encontramos Bob Geldof y un servidor. Bono de U2.
"De pequeño no hacía otra cosa que oir cintas de todos estos tipos. Me han enseñado mucho y les estaré eternamente agradecidos. Hubo una época en que solo oía cintas de Los Toretes". Alex Turner de Arctic Monkeys.
"Si Jose Angel no esta mal, pero como artista de vanguardia que soy, me quedo con Porrina de Badajoz. Eso si que es "avant-garde"." Gaukhar Yavkalkhodzhaev a.k.a Yavi. Uzbekistan First Director.
"No me cabe la menor duda de que el simple hecho de que una civilización extraterrestre más avanzada que la nuestra escuchara por error todas estas cintas, sería motivo suficiente para aniquilar a la raza humana para siempre" Stephen Hawking. Astrofísico.